Tuesday, April 05, 2011

I don't wanna get buried in a gay cemetery.

Hola mis güilos, a pesar de lo jóvenes y sanos que nos sintamos, todos eventualmente moriremos y nuestros restos decadentes terminarán tirados en alguna carretera, entambados, deshechos con ácido, enterrados en una fosa común, comidos por los chacales, calcinados en un horno, perdidos en el mar, congelados en una cueva, digeridos en la panza de una ballena, vaporizados en una explosión, convertidos en Soylent, momificados y exhibidos en algún museo, etc. Los más afortundos iran a parar a una cripta o un cementerio donde durante un tiempo, su familia y amigos los visitarán hasta que ellos también mueran y sus restos terminen siendo un nombre en una lápida que no significa nada para nadie. Excepto para los ñarks, darketos y vampiros urbanos quienes moran las tumbas como parte de sus rituales de ridiculez extrema, los cuales consisten en tomar caguama recargados en una cripta, tomarse fotos en días nublados poniendo carita triste bajo los mausoleos, orinarse en las tumbas, robar cal para arianizar sus rostros y preparar tortillas; jugar a las escondidas, trabajar de medio tiempo como jardineros e inspirarse para escribir legendarios poemas.

Soledad en la cola de las tortillas

Es un día oscuro y tenebroso
la gente está formada con el rostro deshecho
formados para recibir su alimento
el pan de la tierra, lleno de muerte y podredumbre
Yo me encuentro entre ellos, como un cuervo vengo por mi carroña
quiero alimentar mi alma en pena
que aunque este rodeada de gente
se encuentra solitaria como en una cueva
soledad en el tianguis, soledad en los bailes, soledad en el pecero
Perreo solitario sin tener a quien arrimarme
la vida es tristeza, la vida es miseria, la vida es soledad...
Pero hoy no quiero morir, debo alimentarme para preparar mi suicidio
el último acto de mi egoísta vida... Doña deme dos kilos porfas.

Pero bueno, no todos los cementerios son así, existen lugares donde aún se puede descansar con estilo y sin temor de que tu tumba termine siendo guarida de vampirindios. Y para todos los gays con estilo hay un lugar donde pueden hacerlo. Existe un exclusivo cementerio en lo alto de Manhattan donde los gays cool pueden descansar en paz después de una vida de excesos, sodomía y hacer historia. Con 'gays cool' me refiero no a los modistos de señoras, estilistas y perseguidores del bicho, sino de gays que cambiaron el mundo de las artes. Y para todos ellos hay un lugar especial en, Midtown Manhattan, para pasar el resto de sus días. Por respeto a los ocupantes de este cementerio no daremos su localización exacta, sólo les diremos como es, una vez que ya están ahí.

Este mágico lugar se encuentra sobre un edificio de oficinas de lo más normal, podría ser cualquier lugar. Al entrar este luce como un edificio ordinario, nada parece indicar el gran secreto que guarda. La gente luce ocupada, aburrida, todo mundo va de un lugar a otro, es el último lugar donde los grandes artistas irían a parar y ahí radica su belleza. Tomas el elevador junto con el vato de FedEx, el office boy, la secre pinche, la secre sabrosona, el jefe cochinote, el empleado mediocre, el que sabe que se quedara ahí para siempre en el mismo puesto por toda la eternidad; los nuevos ricos, la superejecutiva y el resto de la gente super ocupada. El elevador va subiendo, subiendo... personas bajan, otras más suben. Continuas subiendo y subiendo, eventualmente cada quien llega a su destino y te quedas solo en el elevador esperando que algo pase. Al llegar al último piso, end of the line. El elevador se detiene se abren las puertas y no hay nada. En este momento cierras las puertas y presionas la clave secreta: 1967, (Summer of Love baby!) El elevador empieza a vibrar, como si algo estuviera descompuesto o fuera a salir mal, una melodía empieza a sonar (walk on the wild side de Lou Reed) y empiezas a subir, los pisos restantes hasta el techo. Se empieza a sentir una tranquilidad absoluta. De esas veces que respiras profundamente y te sientes como en un hermoso sueño donde el tiempo no existe y nada puede salir mal.
Todo es perfecto... (escuchas I´m waiting for the man de The Velvet Underground) al salir del elevador hay un pasillo a media luz iluminado por una lampara fluorescente que esta fallando y se enciende y apaga continuamente. El pasillo está cubierto por posters de conciertos clásicos en todo el mundo, de todas las épocas: Haight Ashbury, Monterey California, Madchester, CBGB, Max's Kansas City, The Factory, Club 100, the Metro, La Hacienda, etc. En las paredes hay fotografías de todos los que yacen en el cementerio en sus mejores momentos, hay fotografías tomadas con cámara Polaroid de fiestas, riots, conciertos; artículos de periódicos pegados, setlists, boletos, flyers, backstage passes, etc. Hay jeringas tiradas en el piso, porros, condones, velas encendidas, el lugar huele a un venue después de un concierto. Se puede escuchar el tenue sonido del viceo de las bocinas de un concierto que acaba de terminar y el humo no deja ver a lo lejos.

Al final del pasillo hay una vieja puerta, la abres y todo se ilumina, detrás de la puerta hay un hermoso jardín, parece que saliste del agujero del conejo ahí está la última morada de todas las leyendas. Ahí está la entrada, una gran puerta estilo, Art Nouveau, con unas grandes letras que dicen: "Cementerio de Nuestra Santa Señora de la Sodomía", arriba de las letras hay dos alegres querubines dándose por el culo. Una vez dentro pueden verse las tumbas de todos los grandes que ahí yacen. Vale la pena mencionar que por obvias razones todo el cementerio esta orientado de tal forma que las tumbas se encuentran mirando hacia San Francisco. Otro dato de lo más obvio es que en este cementerio todos los árboles están torcidos.
En este cementerio se encuentran enterrados: Freddy Mercury, Brian Molko, David Bowie, Pet Shop Boys (Neil Tenant y Chris Lowe), Andy Warhol, Graham Norton, Oscar Wilde, William Burroughs, Holly Johnson (de Frankie goes to Hollywood), Stefan Olsdal, Lou Reed, Beth Ditto, JD Samson (Le Tigre), Rock Hudson, Alexander McQueen, Karl Lagerfeld, Nicolás Ghesquiere, Marc Jacobs, John Galliano, Elagabalus, John Cage, Javier (el gay de los Simpson), Bret Easton Ellis, Tom Ford, Michael Kors, Patrick Wolf, Yves Saint Laurent, Leonardo Da Vinci, Douglas Coupland, Tchaikovsky, Chuck Palahniuk, Charles Baudelaire, Paul Verlaine, Michael Stipe, Emily Dickinson, Rob Halford (Judas Priest), Jónsi Birgisson (Sigur Rós), Donatien Alphonse Francois Marquis de Sade, Francois Ozon, entre otros.

**Nota, muchas de las personas de las que se habla en este artículo aun no mueren, pero si murieran y fueran enterradas aquí, la cosa sería más o menos así.**

Ahora sí, podemos comenzar. A diferencia de otros campos santos, donde las actividades se limitan a bailar sobre la tumba de tus enemigos, llorar, dar condolencias, rezar y poner flores. En el, Cementerio de Nuestra Santa Señora de la Sodomía, las actividades son totalmente diferentes.
En este cementerio, las leyes del tiempo y el espacio no tienen validez y al entrar en él te transportas a un universo creado por las personalidades que lo habitan. Cada tumba es un universo diferente y al posarte sobre ella instantáneamente te transportas a un mundo mágico acompañado por quien está durmiendo hecho calaca.

Hay muchas tumbas para escoger y puedes empezar donde quieras, sin embargo es recomendable empezar con la de Oscar Wilde. Al posarse sobre su estilizada tumba aparece Lord Henry, personaje de la novela, El Retrato de Dorian Grey, quien te acompaña en tu viaje y te enseña importantes lecciones sobre la aristocracia, el hedonismo, el arte, el amor y la belleza.
"La belleza es una de las formas del genio; la más elevada, si se quiere, porque no tiene necesidad de ser explicada; es uno de los hechos absolutos del mundo." (Lord Henry en Wilde p.15)

Si decides quedarte un rato con Lord Henry, él te llevara a pasear en el Londres de la época Victoriana con un sombrero de copa, un monóculo y mucho opio. Andarán por todas las fiestas aristócratas animadas por la ginebra y en absinthe; tendrán pícaras visitas al campo con todo e intrigas; viajes de cacería al África, tomarán el té con Lady Ágata; harán alocadas visitas a Paris; conocerán a todos los artistas y fumaran juntos opio en los muelles de Londres. Y en cada una de sus aventuras Lord Henry te revelará un poco de su sabiduría... "El cigarrillo es el modelo perfecto del perfecto placer. Es exquisito y le deja a uno insatisfecho" (Lord Henry en Wilde p.48)

Si aprovechas tu tiempo con Lord Henry, él se convertirá en tu mentor y gracias a sus enseñanzas te convertirás en todo un caballero inmoral inglés, listo para enfrentar con estilo cualquier situación; hacer todo lo que quieras y siempre verte bien. Eventualmente cuando Lord Henry termine de entrenarte te contará uno de los secretos más importantes de la existencia...
"Todo se convierte en un placer cuando se hace muy a menudo. Ése es uno de los secretos más importantes de la existencia." (Lord Henry en Wilde p.127) Lord Henry le ha regalado su sabiduría a muchos jóvenes aspirantes a caballeros inmorales, pero según cuentan los chismes del cementerio, Charlie Sheen, fue uno de sus mejores alumnos. En eso creo que todos estamos totalmente de acuerdo.

Si caes en la tumba de Javier (el gay de Los Simpson), apareces en su tienda y puedes comprar muchas cosas como un sombrero de Daktari, el robot de la película "Clank Clank Estas Muerto", revistas Teleguía de los años sesenta, zancos pogo, el Descombobulador Atómico de Rex Marte, juguetes previos a las normas de seguridad, muebles inflables y miles de artículos coleccionables. Además, también puedes tomar whisky con Javier de una licorera de la Guerra Civil, comer dulce de cactus, bailar música disco y tomar un tour para descubrir los lugares más sórdidos de la ciudad como la tienda donde Lupe Velez compro el escusado donde se ahogó y conocer cuántas celebridades se han humillado en su propio jardín. El único problema es que cuando vayan a comer pasaran por una really awkward social situation.
- Hola Javier -Ahhhh Acacio... - ¿Con que es esta tu mama enferma? - Ay! No empecemos aquí Acacio.
A pesar de esto, todo mundo se divertirá con Javier y si tienes problemas para aprender a aceptar a los gays, después de esta experiencia... ZAP! Pas de problème.

Si vas con un amigo o amiga que es gay, pero aún no sale del closet, a pesar de que todo mundo extraoficialmente ya conozca su secreto. Al pararse sobre la tumba de Brian Molko empieza a sonar la canción de Nancy Boy y la persona en cuestión al igual que en el video alternativo de esta canción se transporta al cuarto de su mama o papa (si es dyke) donde al principio luce reprimidamente tranquilo, con una botella de vodka a su lado. Cuando de repente empieza a beber y beber como poeta en día de paga, hasta que sin darse cuenta toma más vodka de lo que a sus instintos reprimidos pudiera convenir, liberando temporalmente su verdadero ser y dejando volar sus ocultos deseos. Y al igual que en el video la persona, en caso de ser hombre se desnuda, se maquilla; se pone una peluca rosa; se viste de mujer; sigue bebiendo y hace mil bizarreces. En el caso de una chica dyke, supongo que se rapa la cabeza; no se rasura las axilas; utiliza un poco de su cabello recién cortado, se hace un gran bigote y con un poco de Resistol se pega pelos en el pecho; se pone un strap-on, unos pantalones vaqueros, una gran hebilla, una pajita en la boca y se pone a bailar y beber meneando la reata. Al final de este viaje, la persona decide dejarse de tonterías y simplemente ser quien en verdad quiere ser.

Unas tumbas populares para los junkies es la de Lou Reed y la de William Burroughs. Si te inyectas heroína y te recuestas, aparece Lou Reed y te arrulla con su música, mientras gozas y te sientes tirado en alguna banca de Needle Park. En la tumba de Burroughs pasa algo similar, si te acuestas en su tumba, aunque no traigas drogas. Aparece él junto a ti, te prepara la jeringa, y él mismo te inyecta. Burroughs se inyecta heroína a tu lado y te cuenta sus historias de junkie. Mágicamente sus palabras te transportan a otras épocas y revives sus relatos.
Si estas hambriento, puedes tomar una lata de sopa Campbells de la tumba de Warhol o comer hamburguesas en la tumba de Beth Ditto. Al posarte sobre esa tumba, aparece Beth Ditto en su carrito de hamburguesas y hot dogs, para atender a todos los vivos y muertos hambrientos después de tantas fiestas a través del tiempo y el espacio. En este puesto se reúnen todos los habitantes del cementerio por lo que es un gran punto de encuentro para conocer a tus artistas gay favoritos. Como recomendación siempre lleva dinero y nunca le pidas prestado a algún inquilino, porque intentará cobrarte el favor lo más pronto posible y lo más probable es que quiera sacarte el dinero del culo.

Continuando con el tour por este campo santo, llegamos a una de las tumbas favoritas de todos, la de Andy Warhol. Si te paras sobre la tumba de Warhol, cierras los ojos, chocas tus talones y repites tres veces: Superstar, Superstar, Superstar. Al abrir los ojos, rompes una pared de papel aluminio y estas en medio de una fiesta en The Factory (#231 East 47 Street 5th), volteas a tu alrededor y todo el mundo esta ahí, Warhol junto con todas sus superstars. Ahí estan: Ultra Violet, Edie Sedgwick, Penny Arcade, Ondine, Paul America, Eric Emerson, Nico, Baby Jane Holzer, Naomi Levin, Ivy Nicholson, Ingrid Superstar, Brigide Polk, Candy Darling, Andrea Feldman, International Velvet, Viva, Mary Woronov, Sugar Plum Fairy, Louis Waldon, Cyrinda Foxe, Chuck Wein Niki Naranjo, Elektrah, Nico, entre otros. Todos estan bailando, The Velvet Underground esta tocando, volteas a todos lados, das vueltas y todo es silver, the Silver Factory, es como estar en el futuro o dentro de una TV Dinner. Tomas un martini y caminas como explorando un mundo diferente; con cada paso The Factory empieza a mostrarse a si misma, es difícil caminar en medio de una verdadera fábrica. Hay muchos obstáculos y cosas sucediendo alrededor: botes de pintura, futuras obras invaluables, un caballo, cajas de jabón, zapatos plateados, gente tirada; algo de popo de caballo como era de esperarse; gente trabajando reproduciendo pinturas; películas siendo filmadas y en general todo mundo bizarreando.

William Burroughs tirado en el suelo inyectándose sin parar y preparando las jeringas para todos; mientras platica con Allen Ginsberg quien ha tenido un tremendo malviaje y se pone a escribir el manifiesto de NAMBLA. Salvador Dalí al ver una fiesta tan surrealista, se pone su gorro y piyama; saca un cuadro y se pone a pintar todo lo que ve y creyendo estar en un sueño agarra a almohadazos a Allen Ginsberg mientras le reclama todo lo que nunca le trajeron Los Reyes Magos. Mientras tanto, Jim Morrison se embriaga y sube a cantar con Lou Reed... "Estaba la pájara pinta, a la sombra del verde limón, con el pico picaba la rama, con las alas recoge la flor! Pobrecita huerfanita, sin su padre sin su madre, la echaremos a la calle a vivir su desventura! Hay viene el carretón de la basura. Hay viene el camión!" Hay sexo por todos lados, en el baño, en el piso, en los cuartos, entre el thinner, en la basura, entre los vidrios. The Factory se convierte en una gran orgía entre seres hermosos quienes guiados por las leyes de la juventud, se procuran placer los unos a otros; gozando de los placeres del amor. Todo ocurre mientras las cámaras filman y las fotografías no cesan, esto se convertirá en una película, por unos minutos todos son estrellas, como se predijo que sería el futuro, donde todos seríamos propensos a volvernos inmortales.

Vas caminando por el día más feliz de tu vida cuando de repente... En la oscuridad hay una bella chica bailando y sonriendo. Te acercas a ella, es hermosa, tiene tanto estilo que podrían estar en cualquier época y se vería aún más genial. Su sola imagen debería estar en un museo; es la nueva Venus. Deberían quemar la Gioconda, ya no la necesitamos. Deberían quemar todo el arte y colgar a todos los artistas, todo este tiempo nos estuvieron engañando. Tanta espera y tantos siglos de veneración a un ser que evoca sentimientos superiores en nosotros se resume en este momento, tan finito y tan perfecto. Esa es la sonrisa, ese es el cuerpo, esa es la musa, ella es la belleza. Tienes ganas de decirle algo, entrar en la escena idílica. Esto es simplemente demasiado, el humo de los cigarros y la ganja forman una espesa niebla; te pierdes y ella aparece frente a ti, está sonriendo. Ni el mejor de los sueños podría estar tan bien escrito. Quieres decir algo (obviamente será algo estúpido) ella lo evita, pone su dedo sobre tus labios, se acerca y te habla al oído. - En el año 2000 todos viviremos en ciudades en la luna y tomaremos Tang con combustible de cohetes. Cierra la frase con un largo y profundo beso. El tiempo se detiene y es como morir, ves toda tu vida pasar y te das cuenta que nada fue tan importante como lo creías, no tan importante como esto. El flashback se interrumpe de golpe... con un pinchazo en la nalga, sientes una sensación de placer subiendo por tu espalda y va por todo tu cuerpo. El amor nunca se sintió así, claro que no, es speed. Ella te toma de la mano y suben corriendo al techo del edificio y con Nueva York a sus pies; juegan, bailan y se dejan llevar entre una galaxia de globos plateados flotando. Al final terminas bajoneando en el sofá rojo al lado de Nico y Edie. Miras por la ventana y ves a la gente con sus sacos y sombreros saliendo a trabajar. Sonríes, ya no tienes que salir a buscar nada, ya tienes todo lo que querías. Te recuestas, prendes un cigarrillo y suena, All Tomorrow Parties... Después de mil y un fiestas así, este edificio sólo puede ser demolido, cualquier otro uso que pudiera darsele a este espacio sería poca cosa.

Si después de todo esto, tienes un malviaje, estas asustado y ya no sabes ni que hacer, aparece Javier con el robot japonés de Santa Clos y te rescata. Javier te sube en su convertible y te lleva de vuelta a la realidad. Despiertas sobre su tumba preguntándote si lo que paso fue un sueño o realidad. Al salir del cementerio escuchas el claxon del auto de Javier con el tema de, El Mago de Oz, y te das cuenta que todo verdaderamente paso. Una última recomendación, a menos que seas shakes, estés desesperadamente estreñido y/o busques al bicho; te recomendamos que de ninguna manera te quedes dormido en este cementerio. En caso de hacerlo, amanecerás con un fuerte dolor anal y cien libras en el bolsillo.

Si vas y no eres cool, este es un cementerio cualquiera con lápidas con nombres grabados de gente que ni conoces. Así que te quedas un ratito, luego te vas a tu casa a ver las novelas y te quedas pensando con mucho sentimiento: "¿Cómo pudo hacer eso Miranda? Y justo en la boda de Melina Alicia y Pepe Luis." Bueno esto ha sido todo por esta ocasión, pero antes de despedirme quiero agradecer a Mary Jane por haber inspirado este artículo. Ahhhh momento! Una cosa, este artículo no se va a quedar así, aún faltan por contar los viajes de muchas tumbas de famosos gays, así que esta historia continuará...

Bibliografía:
Wilde, Oscar (1989). "El Retrato de Dorian Grey" en Oscar Wilde, "Sepan Cuantos...". Editorial Porrua. México D.F.

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