Continuando con el tema del Oso peligroso, presentamos el siguiente testimonio, de Sir Gerard Rosincrans, quien sufrió un ataque del Oso peligroso en el semiparadisiaco puerto de Acapulco. Para que vean que si es cierto y que en esta revista no somos alarmistas. Bueno los dejo con el testimonio y unas preguntas que este importante banquero británico respondió para Gente Corriente. Sin más preámbulos, vamos al testimonio."Pues baje ese día para meditar a la orilla de la playa mientras escribía el tercer capítulo de mi libro, la tarde era serena, el clima era perfecto, la situación era ideal para pedir un trago. -vodka tonic- pedí al mesero, lo trajo en seguida mientras escribía mi libro, las ideas venían a mi cabeza rápidamente.
Después de algunos minutos mi trago se había acabado, pedí otro más, seguí escribiendo y para cuando acabe con el tercero las ideas ya no fluían tan rápidamente, mi mente estaba un poco más lenta de lo usual, no preste atención, supuse que tenía algo que ver con la belleza del atardecer y seguí escribiendo y tomando vodka.
Ya para cuando eran las ocho o nueve de la noche, la verdad es que no recuerdo muy bien, pues los recuerdos son bastante vagos, me paré para ir a mi habitación. En ese momento, el mundo se me vino abajo, ni siquiera podía moverme adecuadamente, tenía una incapacidad increíble para articular palabra alguna. El trayecto hacia el elevador fue lento y tortuoso, solo podía escuchar la risas que se burlaban de mi a lo lejos, no perderé el tiempo en explicar que fue lo que ocurrió en el baño esa noche, solo diré que un grupo del Departamento de Saneamiento y Salubridad del Estado de Guerrero estuvo a punto de cerrar el hotel debido al estado en que se encontraba ese baño.
Salí del baño, me recosté para pensar unos momentos y quede profundamente dormido.
Al otro día me levante aún sintiendo los efectos del vodka que había tomado la tarde anterior. Baje al restaurante a comer algo, para no sentirme tan mal, pero de solo oler la comida las nauseas me regresaron, no desayune nada. Decidí salir a pasear por la playa, esperando sudar un poco todas las toxinas que había tomado el día anterior, mientras caminaba, trataba de recordar lo que había ocurrido la tarde anterior, después de mucho meditar me di cuanta de que no lo recordaría nunca, mi cerebro había decidido borrar cada momento de esa tarde, los únicos recuerdos que tengo de esa tarde es el sabor del vodka con el que desperté. Así como las cosas que escribí en mi palm esa tarde. Después del paseo por la playa, llegué al hotel y mientras caminaba al elevador pasé por el bar en donde me habían servido el vodka, me acerque y le pregunte al barman lo que me había servido la tarde anterior. -Vodka tonic- me contestó, como si no lo supiera, tratando de evitar la cruel verdad de los acontecimientos de la tarde anterior.
-Si , eso ya lo se, pero con que vodka me lo serviste?
Le pregunte seriamente, fue ahí cuando me di cuenta de lo que me había causado todos esos malestares. - Oso negro (léase Oso Peligroso) joven, le sirvo otro? - Sí por favor - "
Después de algunos minutos mi trago se había acabado, pedí otro más, seguí escribiendo y para cuando acabe con el tercero las ideas ya no fluían tan rápidamente, mi mente estaba un poco más lenta de lo usual, no preste atención, supuse que tenía algo que ver con la belleza del atardecer y seguí escribiendo y tomando vodka.
Ya para cuando eran las ocho o nueve de la noche, la verdad es que no recuerdo muy bien, pues los recuerdos son bastante vagos, me paré para ir a mi habitación. En ese momento, el mundo se me vino abajo, ni siquiera podía moverme adecuadamente, tenía una incapacidad increíble para articular palabra alguna. El trayecto hacia el elevador fue lento y tortuoso, solo podía escuchar la risas que se burlaban de mi a lo lejos, no perderé el tiempo en explicar que fue lo que ocurrió en el baño esa noche, solo diré que un grupo del Departamento de Saneamiento y Salubridad del Estado de Guerrero estuvo a punto de cerrar el hotel debido al estado en que se encontraba ese baño.
Salí del baño, me recosté para pensar unos momentos y quede profundamente dormido.
Al otro día me levante aún sintiendo los efectos del vodka que había tomado la tarde anterior. Baje al restaurante a comer algo, para no sentirme tan mal, pero de solo oler la comida las nauseas me regresaron, no desayune nada. Decidí salir a pasear por la playa, esperando sudar un poco todas las toxinas que había tomado el día anterior, mientras caminaba, trataba de recordar lo que había ocurrido la tarde anterior, después de mucho meditar me di cuanta de que no lo recordaría nunca, mi cerebro había decidido borrar cada momento de esa tarde, los únicos recuerdos que tengo de esa tarde es el sabor del vodka con el que desperté. Así como las cosas que escribí en mi palm esa tarde. Después del paseo por la playa, llegué al hotel y mientras caminaba al elevador pasé por el bar en donde me habían servido el vodka, me acerque y le pregunte al barman lo que me había servido la tarde anterior. -Vodka tonic- me contestó, como si no lo supiera, tratando de evitar la cruel verdad de los acontecimientos de la tarde anterior.
-Si , eso ya lo se, pero con que vodka me lo serviste?
Le pregunte seriamente, fue ahí cuando me di cuenta de lo que me había causado todos esos malestares. - Oso negro (léase Oso Peligroso) joven, le sirvo otro? - Sí por favor - "
Ahora veamos una microentrevista sobre este asunto:
Enid Molko: Y como se sentía bajo los efectos del oso peligroso (lease Oso Negro) Señor Rosincrans(S.R.)
S.R.: Pues de la verga, me sentía estando pedo, pero sin todas las cosas buenas que eso conlleva, me sentía cansado, no me sentía feliz, me sentía ridículo. Podía sentir las risas a mis espaldas, me sentía un cero a la izquierda.
Enid Molko: Sentías ganas de morir?
S.R.: Si, cualquier cosa era buena a seguir así.
Bien, estimados lectores, aqui tenemos el testimonio de un sobreviente el Oso Peligroso. Pero no todos logran sobrevivir, para contar como se sintieron. Muchas personas no pueden con el veneno y mueren. Estas personas usualmente mueren de maneras interesantes. Como por ejemplo flotando en la alberca de algún hotel, colgados de los árboles, en jaulas de animales salvajes, en fábricas de croquetas (Croquetas Soilent) o en contenedores de basura. Ohhhh si... "Oso Peligroso, mata tan rápido que se ven caer" o vomitar.
El testimonio del Señor Rosincrans ha sido remitido a Interpol y al MI6 quienes continuarán con la búsqueda del Dragoslav por el mundo. Así termina este artículo, nos vemos la próxima vez a la misma batihora y por el mismo baticanal...
Share
