Wednesday, December 08, 2010

Otra manera del salvar al planeta

Este es un espacio dentro de Gente Corriente pagado por Personas por el Ético Trato de los Indios A. C.

El mundo en la actualidad sufre las consecuencias de más de dos siglos de revolución industrial lo cual ha tenido efectos devastadores sobre el planeta, al grado de poner en jaque la supervivencia a largo plazo de diversas especies nativas de este planeta incluyendo la humana. La tendencia natural a la hora de señalar y buscar responsables es ir contra los países industrializados y las naciones que emergen como las nuevas fábricas del mundo; sin embargo todos somos culpables del calentamiento global, cada una de nuestras acciones por inocente que sea tiene repercusiones sobre nuestro entorno inmediato. Y en un planeta pequeño, cada huella de carbono cuenta. Es por esto que nuestra organización aprovecha este espacio para denunciar a un sector que desde tiempos arcaicos ha sido un enemigo declarado del planeta... los indios.
Con este término nos referimos a todos los individuos de los diferentes grupos étnicos que habitan en distintas regiones de México y América Latina, los cuales son descendientes de los primeros pobladores de América y son popularmente conocidos como 'indios'. Estos seres distan mucho de ser la encarnación de las bondades ingenuas, virtuosas y amables; las cuales les fueron atribuidas por los pensadores de tiempos coloniales, quienes los tenían en un alta estima por estar libres de la contaminación de la civilización y vivir en armonía con la naturaleza. Esto nunca estuvo más alejado de la realidad y hoy en día podemos comprobar el daño ambiental producto del mito del buen salvaje. A continuación se enuncian los delitos ambientales de los indios.

- Invaden zonas naturales protegidas. En su afán por alejarse del mundo civilizado y de las comunidades existentes, estos grupos optan por adentrarse en bosques, selvas, sierras, barrancas, manglares, pantanos, playas etc. Estableciendo sus comunidades en zonas naturales las cuales anteriormente se encontraban libres de presencia humana, en algunas ocasiones, estas comunidades se establecen en zonas naturales protegidas con sus respectivas consecuencias negativas como: deforestación, contaminación del agua, erosión, empobrecimiento de suelos, destrucción de ecosistemas, eliminación de fauna nativa, etc. El establecerse en esta clase de zonas también es nocivo para estos grupos, porque limita su acceso a programas sociales y servicios.

- Sus ineficientes prácticas agropecuarias dañan el ambiente. Una vez establecidos en zonas naturales prístinas; estos individuos inician su proceso de destrucción: Se talan los árboles para hacer espacio a las nuevas parcelas y se quema la superficie recién deforestada con el fin de prepararla para la agricultura de temporal. Con el suelo listo, inicia la siembra del monocultivo de su preferencia, entre los que destacan maíz y caña de azúcar, los cuales en pocos años empobrecen los suelos, volviéndolos infértiles y provocando la necesidad de destruir más hectáreas de bosques y/o selvas para continuar con la ineficiente producción agrícola.

- Matan animales en peligro de extinción. Su precaria situación económica los lleva a la captura y/o caza de especies de animales y plantas nativas del lugar donde viven, muchas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Una vez capturadas o cazadas, estas especies animales y vegetales son malbaratadas a pie de carretera, mercados populares o vendidas a intermediarios quienes son los que verdaderamente obtienen un beneficio económico de esta actividad ilegal.

- Deforestación. La tala inmoderada es otra actividad nociva en la que incurren estos grupos, los cuales con el fin de ganar algo de dinero para garantizar su precaria supervivencia; destruyen bosques y selvas para conseguir maderas finas, las cuales venden a intermediarios por poco dinero. Usualmente se asocia la destrucción de la naturaleza con la generación de riqueza, sin embargo para el caso de la destrucción ambiental generada por los indios, esta es más por amor al arte que por beneficios económicos. La destrucción y el uso inmoderado de los recursos naturales que llevan a cabo en zonas naturales no los beneficia económicamente lo suficiente como para elevar su nivel de vida en términos reales, únicamente los hace sobrevivir en sus miserables condiciones de vida un poco más de tiempo; por lo que estas comunidades se vuelven dependientes de la destrucción del ambiente para garantizar su supervivencia en el corto plazo.

-Fomentan el no reciclaje al vivir entre la basura. La arcaica fascinación por la acumulación de desperdicios sólidos heredada de sus ancestros, la falta de nociones sobre el manejo de residuos y valor económico de los mismos hace que estas comunidades tengan un deficiente control sobre su basura lo cual es nocivo para el entorno y para la propia salud de la comunidad.

- Con sus fogones y quema de llantas producen gases de efecto invernadero. Con el fin de cocinar, protegerse del frío, la quema de basura, bosques y pastizales generan dióxido de carbono dañino para el futuro de la vida en la Tierra.

- Contaminación del agua. Al vivir en zonas naturales, estos grupos utilizan el agua de ríos y lagos para uso doméstico, por lo que lavan su ropa en ríos, vierten productos químicos, orinan, defecan y tiran basura. Todas estas acciones en detrimento de la calidad del agua y la destrucción de las especies de animales y plantas que habitan en los mantos acuíferos.

- Esparcen microbios y enfermedades. Sus deficientes condiciones de salud producto de sus precarias condiciones de vida, los vuelven portadores de gran variedad de parásitos, virus y bacterias lo cual es un peligro para la salud pública.

- Nulo control de natalidad. Estos individuos tienen más hijos de los que son capaces de cuidar y mantener económicamente, esto provoca que sus hijos de hereden las desventajas socioeconómicas de sus padres, perpetuando la miseria y malas costumbres por generaciones. El bajo nivel educativo y las condiciones de marginación de estos niños los vuelve vulnerables a ser utilizados por terceras personas con fines de explotación. El aumento de su población pone más presión sobre los recursos las zonas naturales ocupadas por estos grupos, acelerando el proceso de deterioro ambiental.

- Por su culpa el país sale bajo en las estadísticas de Índice de Desarrollo Humano e indicadores internacionales de educación, salud, vivienda, calidad de vida, empleo, etc. opacando los avances alcanzados en otros rubros de la gestión pública. Año con año los gobiernos gastan miles de millones de dólares en programa sociales con el fin de mejorar el nivel de vida de estos grupos, con resultados bastante limitados. Lo poco que se ha avanzado en el mejoramiento de la calidad de vida de estos individuos ha ocasionado gastos millonarios durante décadas, los cuales no han dado frutos. Estos recursos públicos podrían ser utilizados en apoyar sectores de la economía que de manera indirecta podrían incidir en la disminución de la pobreza, ó ser invertidos en el desarrollo de energías renovables para disminuir la generación de gases de efecto invernadero.

- Sus extrañas lenguas y dialectos contaminan los oídos. En un mundo no dominado por indios hace totalmente irrelevante el seguir conservando lenguas arcaicas provenientes de la Edad de Piedra. Otra desventaja de estos grupos es seguir utilizando estos medios de comunicación, los cuales jamás volverán a su antigua gloria, por lo que el uso de estas lenguas los condena a continuar en desventaja frente al resto del mundo prolongando su pobreza y por añadido la destrucción ambiental por amor al arte.

- Sus extrañas vestimentas típicas son un ataque al buen gusto. Muestra del mal gusto en su vestir es que los diseñadores se han inspirado en muchas razas, menos en los indios. Marc Jacobs en los asiáticos; Dolce y Gabbana en los africanos, pero nunca en los indios. Ellos son más para National Geographic, no para Fashion TV. Las únicas portadas donde puedes verlos es en las portadas de reportes de pobreza de la ONU, nunca en Vogue o Harper's Bazaar.

- Desperdician recursos naturales fabricando artesanías que nadie compra, además de que son nocivas para el ambiente por su gran contenido de plomo. La producción en masa, los robots, los asiáticos, el comercio global y siglos de glorioso diseño industrial han vuelto obsoleto el uso de artesanías. Estas ya no son necesarias, ya nadie quiere ollas de barro, flautas de madera, máscaras, baleros, ropa "típica", muñecas de trapo, juguetes de madera, canastas, estatuas de animales deformes, collares y pulseras de piedras corrientes, huaraches de suela de llanta, etc. Todos estos productos sólo nos hacen recordar tiempos arcaicos prematerialistas. Estas artesanías no están sujetas a normas de calidad de ningún tipo; sus métodos de producción son ineficientes, poco competitivos y sus trabajadores carecen de los más básicos derechos laborales. La obtención de las materias primas para la producción de estas artesanías provoca la destrucción de grandes extensiones de bosques, erosión de los suelos, contaminación y el desperdicio de mano de obra, la cual podría estar trabajando en una plantación a punta de latigazos.

- Su existencia es negativa para el sector turístico de los países. Ahuyentan al turismo mendigando en diversas partes de las ciudades mostrando el lado negativo de sus respectivas sociedades; rompiendo con la imagen de modernidad que se intenta promover al menos en apariencia. Su presencia, atrae al turismo de mala calidad como hippies/activistas y antropólogos nacionales y extranjeros, los cuales son turismo de mala calidad ya que al ser una bola de "pobretones miserables" dejan una derrame económica mínima en los lugares que visitan; incrementan la incidencia delictiva; aumentan en un 75% la contaminación sonora por tamborazos; disminuyen el atractivo turísico de los lugares que visitan así como el valor de las propiedades que rodean sus asentamientos.

Por todas estas razones creemos que los más ético es exterminar a los indios ó en la medida de lo posible limitar su reproducción, esterilizándolos. Cuando estés a punto de comprar una olla de barro a pie de carretera, una piel de víbora o regales una moneda, piensa en el daño ecológico que le estas causando al planeta.

¿Sabes cuanto tarda en descomponerse un indio?
5000 años! Por eso es que los arqueólogos los siguen encontrando. Al final de la historia cuando las hordas simias comandadas por Dr. Zaius abran la tierra en busca de los viejos artefactos del pasado, sólo encontrarán indios, dildos de plástico y pañales... Unete a PETI, colabora con nosotros ó envía tu donativo.

PETI... Soluciones simples a problemas globales.

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Sunday, December 05, 2010

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Próximamente... en 2011.




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