Sunday, January 22, 2006

Soylent shit

Continuando con el asunto de la antropofagia (osease comer gente) les presento este escrito que no sé como clasificarlo sólo sé que es algo que de repente mi mente lo dictó y plantea una idea interesante. ¿Cómo sería si nos comieran? ¿Cómo nos matarían? ¿En qué platillos nos cocinarían? ¿Le provocaríamos diarrea a alguién? Estas son preguntas que cruzan mi mente de repente. Así que sin más preámbulos los dejo con esta cosa espero que lo disfruten mis deseos de ingestión.

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Quiero que me cocinen


Quisiera que un día me dieran muerte para alimentar a otros. Quizás sufra en el rastro mientras el funesto acto de darme muerte se concreta.

Después de permanecer enjaulado y entumido durante semanas viviendo a base de inyecciones de esteroides y agua sucia. Seré sacado de la jaula y enviado a la húmeda y oscura arena del rastro donde seré brutalmente asesinado a palos.

O quizás me encajen un cuchillo en el corazón y me dejarán correr mientras me desangro y grito. Mis verdugos se divertirán viéndome como corro y me muevo sin control después de que mi cabeza sea cortada.

Quisiera ver como es utilizado mi cuerpo para hacer un sin número de alimentos y productos. Me encantaría ver la manera en que el carnicero me despelleja y me corta en pedazos, como desmiembra cada parte de mi cuerpo con sus hachas y cuchillos y cuelga mi carne en ganchos de acero en el congelador. ¿Cómo se verá mi sangre corriendo por la alcantarilla? El carnicero separa todo lo útil y la da las menudencias a los perros.

Saca un poco de carne y la pone en exhibición en la carnicería con el anuncio de "100% carne humana" Las señoras llegan, compran la carne y eligen la presentación. El carnicero la corta, la empaqueta, la machaca, la muele, la corta en trozos, la licua y hace bisteces.

Las señoras llevan la carne a sus casas para guisarla, hervirla, freírla, empanizarla. Y alimentarán a su familia, los niños despreciarán mi hígado, pero serán obligados a comerlo para que crezcan fuertes y sanos. Llenarán sus estómagos y pasarán un día sin tener hambre.

¿Se reunirán todos en un gran banquete para cocinar mi cuerpo? ¿Invitaran a sus amigos y familiares a comer mi carne? ¿Sus hijos se nutrirán comiendo mi carne y pediran un bocado más? Quiero ver cuantas hamburguesas sacan de cocinar mi carne, y que brebajes hacen con mi sangre. Se saciarán con mi carne, la asarán, morderán mis huesos y se alegrarán de encontrar aún algunas pequeñas gotas de sangre, rasgarán mis tendones y nervios con sus dientes y los jalarán hasta romperlos. Quiero ver a la gente chupar la carne de entre mis dedos.

En las taquerías guizarán mis tripas y lengua con mi sangre y darán quesadillas con mis sesos. En las menuderías los ebrios curarán su cruda comiendo mi panza y comerán tacos de mis cachetes. Echarán trozos de mi carne en aceite hirviendo para hacer carnitas y mi piel será hecha chicharrón, echarán mis ojos en salmuera para echarlos en las cervezas con la creencia de que comiéndolos obtendrán poderes sexuales.

En las fábricas utilizarán mis huesos como materia prima para crear toda clase de cosas. Y los hippies harán collarcitos con mis dientes.

Todo mi cuerpo será utilizado... vivo en un mundo industrial donde nada es desperdiciado...



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1 comment:

Anonymous said...

supongo que si las vacas pensaran alabarìan tu escrito.